Viajando a través del tiempo nos encontramos en la década de los 50, los años más gloriosos hasta el momento en el cine, sobre todo del “drama”, de las bandas sonoras y de las grandes comedias musicales de Hollywood. 

En esta época en el ámbito del cine, no se andaban con miramientos, querían que sus obras fuesen las mejores y contasen con todos los detalles necesarios para conseguir su propósito: pasar a la historia como una de las mejores películas. Por ello, sus presupuestos eran espléndidos y con ellos lograban aspirar a grandes producciones en las que contaban con magníficos actores y actrices, composiciones musicales, escenografías, etc. 

Asimismo, a la década de los 50 se la podría definir como la “década de oro” en cuanto a  la música como parte del cine. Además, todo el mundo estaba emocionado porque de repente se incorporaron nuevos géneros y ritmos que hasta entonces habían sido desconocidos en las películas. En estos años se agregó al cine el Jazz, así como músicas exóticas. 

A continuación, se van a exponer algunas de las películas musicales de más éxito de la década, que a día de hoy, y a pesar de haber transcurrido más de 50 años, continúan sonando.

Uno de los films más sonados es Cantando bajo la lluvia, una película musical de 1952 que fue dirigida por Gene Kelly y Stanley Donen. La cinta fue todo un logro debido a sus escenas de baile, en concreto la protagonizada, bajo la lluvia, por Gene Kelly. Asimismo, fue la película más taquillera durante el primer mes de estreno y la décima del año 1952. Y por si esto fuera poco, está considerada por el American Film Institute como el mejor musical del cine estadounidense.

 Otra de las grandes bandas sonoras se encuentra en la película estadounidense de 1950: Ben-Hur. El film fue dirigido por William Wyler y está ambientado en los tiempos del emperador Tibeo, en la provincia romana de Judea. Miklós Rózsa, el compositor de música sinfónica y cinematográfica, fue el encargado de ponerle ritmo a esta película para la que se estuvo documentando acerca de la música de la antigüedad grecorromana. 

Así suena la obertura:

Los años 50 también estuvieron marcados por grandes películas de dibujos animados que volvieron loco al público infantil.

Un ejemplo de ello, es la cinta de Cenicienta, una película animada que fue producida por Walt Disney en 1950 y que está basada en el cuento popular de Charles Perrault.

Otra gran película admirada por los más pequeños, que fue un poco posterior a Cenicienta, concretamente en el año 1955 fue La dama y el vagabundo producida también por Walt Disney.

Esto serían solo unos ejemplos, porque los años 50 fueron muy prolíficos en estupendas bandas sonoras. Como se ha podido constatar la década de los 50 fue la década de oro de la música cinematográfica.

                                                                                                                                Marina Miguel